viernes, 14 de diciembre de 2007

Inocente mariposa

No es hija de la casualidad que a los que no se les puede probar - o a quienes no se les quiere dar por probada - su culpabilidad no se les diga inocentes, sino no culpables. La inocencia es una cualidad del espíritu que supone una limpieza o pureza del alma que, en muy pocas ocasiones, se aplica a los acusados de delito. La no culpabilidad se refiere a que se estima que no se ha cumplido a cabalidad con los criterios de la ley para declarar a alguien culpable. Dicho de otra forma, se puede ser no culpable sin ser inocente.

La perplejidad del ex funcionario público ante el dictamen de no causa a su favor es, me parece, la mejor "pueba" de que el hombre, en su fuero interno, se sabe culpable. De otra manera, ¿por qué sorprenderse del dictamen judicial? Tal parece que él mismo, al escuchar y ver la prueba en su contra, quedó convencido, por lo que está sorprendido por la decisión del juez.

El resto del país también.

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