jueves, 6 de diciembre de 2007

Con y sin tilde

Conviene recordar que hay un número de vocablos que pueden escribirse correctamente con y sin la tilde, por ejemplo: amoníaco, amoniaco; cardíaco, cardiaco; demoníaco, demoniaco; elegíaco, elegiaco; omóplato, omoplato; ósmosis, osmosis; policíaco, policiaco; termóstato, termostato. La Real Academia Española prefiere, en algunos casos, la forma con tilde y en otras la contraria. Se da el caso de que una forma es de mayor uso en una región del mundo que en otra. También hay autores que usan una u otra. Lo importante es que sepamos que no es incorrecto usar estos términos de una u otra forma.

No hay comentarios: