Hace tiempo que el imperio de la ley en Puerto Rico quedó sustituido con actitudes imperiosas de este gobierno. El atropello a los periodistas en el Senado es la muestra más reciente de ello. Los tribunales dejaron de ser custodios del estado de derecho. El país está impotente ante un gobierno fascista que controla los tres poderes constitucionales y vapulea al «cuarto poder».
Habrá que esperar al 2012 para rescatar los poderes públicos de esta toma por asalto.
No hay comentarios:
Publicar un comentario