miércoles, 9 de julio de 2008

¡Qué defensa!

Escribo sin el beneficio de haber leído las 52 páginas de la solicitud de desestimación de los cargos contra el Gobernador. Pero, si la prensa ha recogido bien la esencia de ese documento, me parece que Acevedo Vilá se ha condenado él mismo. Cuando lo que uno puede alegar a su favor es que los delitos están prescritos, que no hay jurisdicción o que se han cometido errores técnicos en la redacción de unos cargos, uno ha concedido que la acusación es cierta en sus méritos, pues dichas defensas no van a la sustancia de lo imputado. Dicho de otra manera, el Gobernador apela a los "tecnicismos", que, si bien pueden favorecerlo en estricto Derecho, son, en gran medida, el último refugio de los culpables. Y todo eso lo remacha con la "defensa" de "todo el mundo en contra mía y yo contra el mundo entero."

Ante el tribunal del pueblo, con esta solicitud, Acevedo Vilá ha hecho una "alegación de culpabilidad."

No hay comentarios: