El derecho penal, con todo lo que implica, no es un instrumento que deba usarse livianamente para atender cualquier problema social o de orden público. La sanción penal debe reservarse para las conductas más lesivas al bienestar colectivo. La propuesta de tipificar como delito menos grave el uso de menores de 14 años para colectas en la vía pública me parece una respuesta excesiva al problema. Como cuestión de realidad, la prohibición general, es decir, independientemente de la edad de la persona, figura ya en la Ley de Vehículos y Tránsito, por razones obvias de seguridad pública.
Elevar esta imprudencia paterna a categoría de «maltrato de menores» luce exagerado. A menos que se trate de una explotación descarnada con fines puramente económicos, sería una medida desproporcionada. En la inmensa mayoría de los casos, en estas colectas bona fide están presentes los padres u otros adultos que supervisan la operación, en la que se acercan a los vehículos, una vez se detienen ante el semáforo con luz roja.
En fin, aunque no es algo que un «buen padre de familia» deba hacer, no creo que amerite seis meses de cárcel y $500 de multa... que los hijos tengan que hacer una colecta para pagar...
No hay comentarios:
Publicar un comentario