domingo, 19 de abril de 2015

"Bull...."

¡Esas son ganas de demandar! El puertorriqueño que ha demandado a las empresas que producen la bebida "energizante" Red Bull, por no cumplir con sus reclamos de "darle alas" a quienes la consumen lo hace con cierta frivolidad, pues todo el mundo sabe y comprende que en el mundo comercial y publicitario se admite cierto grado de lenguaje hiperbólico. Cierto es que existe lo que en inglés llaman "truth in advertising", pero ello está reservado para cuestiones importantes, como productos alimenticios, medicinales o terapéuticos. Nadie en su sano juicio cree realmente que productos como el de este caso tengan los efectos reclamados. Para decirlo en el idioma del producto, y muy a propos, esto es "a lot of bull". De hecho, por lo que se sabe, el hombre no ha señalado los daños sufridos por haber consumido la bebida desde 2002.

Excepto el haber caído de tonto todo este tiempo...

No hay comentarios: