Cuando se toma el camino de aceptar innecesariamente ciertas palabras del inglés, no se sabe cuándo parar. Ahí tienen el término milord, tomado de my lord, forma inglesa para referirse a miembros de la realeza y otras personas distinguidas con el título nobiliario. Ello supone que se ha aceptado la voz lord y Lores, refiriéndose esto último a la Cámara parlamentaria británica.
En lo que respecta a lo primero, lo que corresponde es «mi señor». Si no hay una equivalencia aceptable, me parece preferible escribir y pronunciar los otros vocablos en inglés, sin españolizarlos ni, mucho menos, admitirlos como parte de nuestra lengua.
No hay comentarios:
Publicar un comentario