Dos jóvenes que se dieron a la tarea de corregir unos letreros en el Parque Nacional del Gran Cañón han sido condenados por "vandalismo" y sentenciados a una probatoria que incluye su exclusión de parques nacionales durante un año. Los muchachos habían emprendido una cruzada, a través de todo Estados Unidos, para corregir letreros y señales. Hombre, si lo que había que darles era una medalla de servicio público, por enmendar unos disparates que llevaban allí más de 60 años. Pero, el tribunal le dio más peso al valor "histórico" de los disparates escritos a mano por la arquitecta que diseñó las estructuras, que a la corrección gramatical.
Yo residenciaría a ese o esa juez.
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