Se escribe demás, con precisiones innecesarias. La crónica deportiva nos dice: "Raúl Casanova finalizó la temporada de 2008 con un sabor agridulce en su boca." Pues, a menos que el sentido del gusto se haya mudado a otra parte del cuerpo, bastaba con lo del sabor agridulce.
Por supuesto, sabemos que el habla pueblerina ha acuñado frases como "tiene el gusto en el...", para significar el mal gusto. Pero, fuera de "vulgaridades" como ésa, que sólo repito aquí con fines didácticos e ilustrativos, el gusto sigue estando en la boca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario