viernes, 31 de enero de 2014

Nada que conmemorar

Es lo que digo: no hablamos español. Leo sobre una línea aérea que ofrecerá vuelos diarios a Santiago, República Dominicana, y añade: «Para conmemorar el lanzamiento...». Pero, hombre, ni que se tratara de un gran suceso histórico del pasado. Porque sucede que lo que se «conmemora» es algo que ha ocurrido y es digno de recordar. En el dudoso supuesto de que este servicio sea algo memorable, entonces se podrá hablar de conmemorarlo cuando, digamos, se cumpla un año de haberlo establecido. Lo que debió decirse es «celebrar» el lanzamiento.

jueves, 30 de enero de 2014

Ciudadanos legisladores

Luce plausible el mecanismo para que los ciudadanos puedan presentar proyectos de ley en la Cámara de Representantes. El fruto de esa gestión no puede ser peor que el de los legisladores electos. Ojalá se le dé paso a las buenas ideas, tanto en la Cámara como en el Senado, y que cuenten con la firma del Gobernador, pues, de lo contrario, será un ejercicio inútil de participación democrática.

Mucha gente con inquietudes cívicas se abstiene de incursionar en la política electoral, por temor a la maledicencia que, lamentablemente, acompaña ese proceso. Personas que podrían aportar su experiencia y talento al quehacer legislativo quedan fuera de ello por decisión propia. Quizá este conducto sirva para hacer posible esa colaboración cívica directa, sin los agravios de involucrarse en la política partidista.

De esta manera, no tendremos legisladores ciudadanos -- por la frustrada reforma legislativa -- pero tendremos ciudadanos legisladores.

miércoles, 29 de enero de 2014

¡Señor, ten piedad!

Se cita al exfiscal y exjuez que asesora al Obispo de Arecibo en los líos suyos propios y en los del sacerdote de esa diócesis que impugna su destitución, diciendo: «No puede oficializar misas (y si lo hace) es una falsa representación». Lo que es una falsa representación del español es confundir oficiar con oficializar. El abogado debería conocer que  se «oficia» la misa, pues «oficializar» es dar validez a lo que no lo tenía.

La misa es una expresión litúrgica oficial de la Iglesia Católica. El sacerdote, como celebrante, no le imparte carácter oficial, sino que meramente la preside.

martes, 28 de enero de 2014

Un aposento en alto

A mi regreso, encuentro varios asuntos en los cuales se pone en entredicho la, por un lado, ofrecida y, por otro lado, reclamada transparencia en los trámites oficiales de la justicia. Entendida y valorada la confidencialidad en algunos aspectos de estas cuestiones, ello no debe usarse como pretexto para encubrir o tapar lo que resulte meramente embarazoso o inconveniente.

Las investigaciones internas, bien sea en la policía, el ministerio público o los tribunales, no deben dar lugar a la sospecha de que se ocultan hechos o se realizan arreglos para favorecer indebidamente a sus funcionarios. El curso tomado por la pesquisa sobre el agente policiaco miembro de la escolta del Superintendente arroja dudas acerca del procedimiento seguido; concretamente, que se haya actuado sin la autoridad debida. El caso tiene una mayor resonancia, pues se trata de unas imputaciones de que dicho agente participó en o consintió un patrón de acoso laboral dentro de la Uniformada. Que se haya sancionado a otro participante por ello, y a él se le haya eximido del castigo es harto sospechoso, habida cuenta de su alegado reclamo de protección política.

La Casa de la Justicia tiene varios aposentos. Cada uno de ellos debe estar limpio y en orden.

jueves, 16 de enero de 2014

Pausa

De viaje. Regreso el 28 de enero, Dios mediante.

miércoles, 15 de enero de 2014

Buena mente

El uso de los adverbios no puede ser una muletilla de la expresión, sino que debe responder lógicamente a lo que se quiere decir. En entrevista al Secretario de Justicia designado se le cita diciendo: «Son casos en los que el Departamento, en aras de su credibilidad, casualmente, debe dedicar todos los recursos que sean necesarios...» ¿Cómo que «casualmente»? Una decisión como ésa no se toma por casualidad o impensadamente, sino todo lo contrario. Debió decir «ciertamente, claramente, definitivamente, indefectiblemente» o de cualquier otra forma que comunique convencimiento y propósito de atender esos asuntos como ameritan.

martes, 14 de enero de 2014

Una inhibición forzosa

Convengo con el compañero Guillermo Figueroa Prieto en que el Juez Presidente del Tribunal Supremo de Puerto Rico tiene que inhibirse en el pleito sobre el retiro de los maestros. La apreciación del colega -- gran conocedor de la ética profesional -- es que las expresiones del JP evidencian un ánimo prevenido en lo que respecta a la controversia que sabía que dentro de poco le tocaría juzgar colegiadamente.

El error se cometió. Da nada vale la distinción bizantina de que el juez Hernández Denton se expresó como administrador de los tribunales. Tal «esquizofrenia» es inadmisible: se trata de la misma persona, y su criterio adelantado reiteradamente quedó comprometido públicamente. La única salida decorosa en derecho y éticamente es la inhibición. Insistir en participar en la resolución del caso sería un desacierto gravísimo.

lunes, 13 de enero de 2014

Tengamos sentido en español

Se cita al Dr. Rafael Cox Alomar, reputado como tribuno, diciendo con respecto al fracaso económico y político de la relación colonial que él llama Estado Libre Asociado: «Inyectar capital adicional a un modelo colapsado no hace sentido...tenemos menos herramientas y menos autoridad política para nosotros tomar decisiones que hagan sentido para nosotros». (Dejo a un lado que con esa afirmación este prócer ha descubierto el Caribe en el siglo XXI.) Cox Alomar, instruido en prestigiosas universidades de Estados Unidos y doctorado en Oxford, piensa en inglés y, por lo tanto, calca la expresión make sense. Los que no hemos llegado tan lejos en nuestra formación académica, pero sabemos mejor español que él, decimos tiene sentido.

Ahí tienen los que admiran exageradamente sus dotes de orador. Los grandes tribunos del pasado no hubieran incurrido en un error tan elemental como éste.

domingo, 12 de enero de 2014

Morrocotudo Marruecos

Es cosa bien sabida que en la mayoría de los países árabes o musulmanes no hay un respeto formal y legal a los derechos humanos, sobre todo, en lo que respecta a la mujer. Es el caso de Marruecos, donde, por ejemplo, la violación queda subsanada con el matrimonio de la pareja en cuestión, ciertamente, cuando menos, una infravaloración del honor y la sensibilidad femenina. Algo así estuvo mucho tiempo disponible en nuestra cultura para la seducción, un «delito» que nunca tuvo el elemento de violencia física o psicológica de la violación.

Ahora, los marroquíes se plantean la deseabilidad de enmendar el estatuto de la violación para eliminar esa indigna puerta de escape de la responsabilidad penal. Les ha tomado mucho tiempo reaccionar al suicidio de aquella adolescente de 16 años que hace un par de años prefirió la muerte al matrimonio con su violador. La mujer en esa parte del mundo clama por justicia en todos los órdenes.

¡Que Alá no permita que sea una voz que clama en el desierto!

sábado, 11 de enero de 2014

«Patología del habla»

El descuido en la expresión da lugar a equívocos, en algunos casos, de naturaleza jurídica. Es lo que ha pasado con el testimono de la patóloga del Estado en el juicio contra Pablo Casellas por el asesinato de su esposa. La doctora declaró que la muerte «es compatible con un escenario familiar, sorpresivo y rápido». Aquí hay dos cosas. La primera es la manía de utilizar la palabra «escenario» con el sentido de la voz inglesa scenario, es decir, ambiente, circunstancia o situación. La segunda es que «familiar» tiene un retintín muy particular en este caso porque el acusado es el esposo de la víctima. Por eso es que la defensa -- que «se agarra hasta de un clavo caliente» --  ha respingado. Lo que la patóloga ha querido decir es que, del cuadro de hechos, se infiere que el victimario le era conocido a la víctima, algo que, ciertamente, no excluye al marido, pero puede incluir a otras personas.

Los testimonios -- sobre todo los periciales -- tienen que estar enmarcados en un lenguaje que no sea capcioso, sugestivo o tendencioso, a fin de que no se les pueda impugnar por parcialidad.

viernes, 10 de enero de 2014

Dando a respetar la Ley

El éxito del estado de Derecho reside, en gran parte, en la aplicación de las normas jurídicas de manera consecuente y contundente. Nada lo debilita más que las leyes que son «letra muerta», por la desidia oficial, o su puesta en vigor selectiva, por criterios ajenos a la buena administración de la justicia.

Por lo que se publica, la Policía ha comenzado bien a hacer cumplir la ley que regula el uso de los vehículos todoterreno, sobre todo en el renglón medular del estatuto: la confiscación. Quienes insistan en retar la ley deben afrontar la pérdida del vehículo, amén del pago de multas sustanciales. No puede haber contemplaciones ni condescendencias en ello.

De igual manera, hacen bien los Bomberos en inspeccionar rigurosamente los negocios del Viejo San Juan con anticipación de las Fiestas de la Calle San Sebastián. En esto tampoco puede haber margen para las violaciones a las normas de seguridad relacionadas con la prevención de incendios y el número de parroquianos en los establecimientos comerciales. La aplicación estricta del ordenamiento en estos renglones es la mejor garantía de que no haya desgracias que lamentar.

jueves, 9 de enero de 2014

Al principio del día

Escucho a uno de esos «expertos» en cuestiones cibernéticas -- y, por ende, muy metido en la lengua inglesa -- decir repetidamente «al final del día», frase que es un calco de at the end of the day. En inglés la frase no tiene el significado literal de la conclusión del periodo de 24 horas, sino el sentido figurado que los hispanohablantes conocemos como «en última instancia». En cualquier caso, lo que se quiere comunicar es la idea de que, a pesar o independientemente de unas cosas, la consecuencia, lo decisivo, el efecto, lo importante o el resultado es el que se señala.

Sea en primera o en última instancia, digámoslo bien en español.

miércoles, 8 de enero de 2014

Contradiciendo las contradicciones

La crónica judicial reciente insiste en destacar las «contradicciones» en las declaraciones de uno u otro testigo en casos de cierto relieve. Con ello, quiérase o no, se va creando la duda en el público acerca de la veracidad de esos testimonios. Ocurre, sin embargo, que no toda incongruencia o variación en una declaración o en versiones sobre unos hechos tiene la misma importancia. Hay que ver su relevancia dentro del contexto total del caso. Hay datos y detalles que no tienen mayor trascendencia; otros son medulares. El paso del tiempo y otras circunstancias pueden producir ciertas diferencias en la narración de unos hechos, sin que ello signifique que se miente. De hecho, un testimonio «perfecto» es inherentemente sospechoso, pues la condición humana muy raras veces lo hace posible, en ausencia de su fabricación.

domingo, 5 de enero de 2014

Ha fallecido el español

Quiero pensar que es un gazapo periodístico, pero no descarto que el error esté en el original. He visto demasiadas barbaridades, como para dudarlo. Se trata de una expresión de condolencia de Lic. Carlos Beltrán, Secretario General del Comité Olímpico de Puerto Rico, por la muerte de otro dirigente deportivo, el también abogado «Lulo» Mendoza, expresidente de la Federación Puertorriqueña de Voleibol, en la cual se lee: «A fallecido un pilar del voleibol nacional».

Lo que ha fallecido es el español en Puerto Rico. Quien lo dude, meta la cara en Facebook, punto de encuentro de disparates ortográficos variopintos de analfabetos funcionales del español.

sábado, 4 de enero de 2014

"Laws, like sausages..."

Es de esperar que el Tribunal Supremo de Puerto Rico acoja la petición periodística para el acceso electrónico a la audiencia sobre los casos en que se discutirá la ley que reforma el sistema de pensiones judiciales. No puede ser de otra manera, habida cuenta del compromiso reiterado del Poder Judicial puertorriqueño con el «acceso a la justicia» y la «transparencia», conceptos que se han convertido en mantras de reciente cuño de la judicatura boricua.

El país quiere verle la cara a los que en este caso «exponen, alegan y solicitan» y a quienes decidirán sobre ello. Quiere oír las voces plañideras del reclamo de «daño inminente e irreparable» por un puñado de dólares más...o menos. Quiere escuchar las preguntas y las respuestas; y ver los rostros profesionalmente inescrutables de los jueces o quizá algún gesto de incredulidad, alguna sonrisa cómplice o enigmática.

Hay que dejar que el país vea, al decir del poeta, en nuestro caso, «cómo se hacen las morcillas»...

viernes, 3 de enero de 2014

Ignorar ignorar

Evidentemente, se ignoran los significados de «ignorar». Hoy, la prensa nos dice: «Gastan más luz los municipios, pero en febrero se pondrá en vigor una ley que los obliga a pagar la electricidad de ciertas instalaciones que ignoraban». Pues, no me lo parece. «Ignorar» es desconocer o no hacer caso. Los gobiernos municipales no desconocen la existencia de dichas instalaciones; tampoco su deber de pagar por la electricidad consumida en ellas. Lo que ha ocurrido es que, muy ladinamente, no han hecho caso de ese deber establecido en una ley de 2011, que es otra cosa. Lo que han «ignorado» es el deber de pagar.

Y eso, más que ignorancia, es una pocavergüenza.

jueves, 2 de enero de 2014

Para no dar palos a ciegas

La información es clave para tomar decisiones más acertadas, y ello es particularmente pertinente en la vida del Derecho. Con frecuencia, la Policía interviene, sin saberlo, con personas violentas debido a condiciones mentales, lo cual da lugar a la muerte del policía o del sujeto en cuestión, en circunstancias que pudieron ser previstas y para las cuales se pudieron haber tomado precauciones, si se hubiera conocido la situación de antemano.

Hace tres años, en Ohio, una agente del orden público perdió la vida a manos de un hombre con ese historial oficial. Ahora, se ha aprobado una ley que obliga a los jueces a notificar a la Policía acerca de las personas violentas que, bien sea por no ser procesables o por ser no culpables por razón de incapacidad mental, han sido puestas en circulación en la libre comunidad. Lo que importa es que se sepa que estas personas tienen una condición mental y son propensos a la violencia. Esta información formará parte de una base de datos a la cual tendrán acceso las agencias del orden público. De esta manera, en aquellos casos en que se conozca la identidad de la persona con la cual se va a intervenir, la Policía contará con esa valiosa información.

miércoles, 1 de enero de 2014

Como un zahorí

Algo tiene la «z», que produce casos raros en nuestra lengua. Porque, mire usted, eso de que se pueda escribir zandía, al igual que «sandía», deja a uno como un «zoquete». Y más «zonzo» queda uno cuando se entera de que la letra «z», además de «zeta», puede ser zeda. Es como para formar un zipizape allá en la RAE, por lo zozobroso de estas cosas, que me dejan zurumbático.